Decir NO, no significa que seamos negativos, significa que nos respetamos, que nos queremos y valoramos como persona y que nos cuidamos ante todo.
El no saber decir No, implica falta de autoestima - Mejor acepto, puede que se enoje conmigo, o que piense mal de mi si no lo hago - Éstas suelen ser nuestras palabras, pero… ¿Por qué hacer algo que no nos gusta? ¿Quién nos obliga? ¿A caso yo no soy dueño de mí?
Somos mentirosos, nos engañamos y engañamos a los que nos rodean. Nuestra boca dice sí y nuestro corazón y dice no.
Una persona sana está en perfecta armonía con lo que hace, piensa y dice, su corazón, su mente y cuerpo están sincronizados. Es una persona con salud, pero cuando no lo está, dice SI por compromiso, actuando de mala gana y sin entusiasmo. No hay nada más triste que ver a una persona que ha perdido el entusiasmo y el amor en lo que hace. Actúa como si fuera un robot; mecánica y programada: a tal hora se levanta, trabaja, hace sus tareas, ve tele etc. Al otro día igual. Así va pasando su vida, entre compromisos y deberes. Me pregunto si esa persona es feliz.
¿Por qué sufrir cuando podemos decir NO y hacer aquello que SI deseamos hacer? ¿Acaso estamos obligados a complacer a todos? Y… ¿nosotros? ¿Hacemos algo para complacernos ?... ¿Por qué aceptar y poner en riesgo nuestra salud? ¿Será que no nos queremos, como deberíamos?
